Pollo ecológico




La gente está cada vez más concienciada y busca comida sana y ecológica. Entre este tipo de alimentos, encontramos el pollo ecológico. A la hora de comprar este tipo de carne para cocinarla, muchas personas se preguntan: ¿en qué se diferencia con los otros tipos de pollo que existen en el mercado?

El pollo ecológico precisa de más tiempo para lograr llegar a pesar lo suficiente como para que pueda ser comido, al menos 90 días de engorde. Sin embargo, los pollos que crecen de manera industrial en solo cuarenta días ya son aptos para comerse.

Los pollos industriales toman medicinas cuándo se ponen enfermos. De esta forma, los antibióticos pueden transmitirse a nosotros. Sin embargo, los pollos ecológicos no toman medicamentos. Si lo necesitaran, se les trataría a través de la homeopatía.

El pollo ecológico se alimenta de productos naturales y se cría en libertad. De esta manera, la carne es más sabrosa y con una apariencia mucho más saludable.

¿Cómo sabes que estás adquiriendo pollo ecológico? 

Es muy fácil, el pollo ecológico está certificado. En su envase aparecerá un sello que garantizará lo que estás comprando.

Hoy en día, si se quiere comer sano, se hace necesario tomar este tipo de alimentos. Cuando algo se cría de forma industrial, las consecuencias pueden ser muy negativas para nuestro organismo. Tenemos que ir pensando, si no lo has hecho ya, en tomar otras costumbres y comer alimentos ecológicos. Vas a notar muchísimo la diferencia en el sabor de un pollo ecológico.

Desde Tasiendo estamos muy concienciados con este tema. Por eso, queremos ofrecerle a nuestros cliente la mejor carne ecológica del mercado. Trabajamos con la marca Campos. Empresa con muchos años de experiencia y precursores en el sector de la carne ecológica. Toman muy en serio su producción y los resultados se notan en el paladar y en tu organismo.

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